martes, mayo 29, 2007

Cierre de RCTV y Libertad de Expresión

El Presidente venezolano Hugo Chávez una vez más hace gala de su falta de delicadeza en la conducción de asuntos públicos sensibles que afectan la imagen de su gobierno. Esta vez su gobierno ha decidido no renovar la licencia del canal opositor RCTV (Radio Caracas Televisión), el más antiguo de Venezuela con 54 años en el aire, supuestamente por violar la normativa de telecomunicaciones al emitir una "programación violenta y moralmente degradante". Sin embargo, esta decisión -amparada
en la ley- parece ser más bien una decisión política como represalia por el apoyo que habría brindado el canal al golpe de estado del 2002. En vez de llamar a una propuesta pública para conceder una nueva licencia por el canal 2 el gobierno ha creado un nuevo canal Teves. El gobierno venezolano estaría así aplicando un tipo de restricción indirecta a la Libertad de Expresión a la luz del artículo 13.3 de la Convención Interamericana de Derechos Humanos (CADH)de la cual es parte signataria la República Bolivariana de Venezuela y que se ha desarrollado más extensamente a través de la Declaración de Principios sobre Libertad de Expresión de la Relatoría Especial sobre este garantía fundamental - "la reina de las libertades públicas en una sociedad democrática"- creada por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.

En caso de que se hubiera establecido a través de un debido proceso que el canal RCTV hubiera violado la normativa de telecomunicaciones y que ameritase como sanción gravísima la no renovación de la concesión entonces el gobierno venezolano debió haber convocado a una licitación pública para la creación de una nueva señal a través de esa frecuencia. Todo esto con el fin de preservar el pluralismo necesario en un medio de comunicación tan masivo como es la televisión abierta. RCTV podrá continuar transmitiendo por cable e internet pero no tiene en caso alguno el impacto de la televisión abierta. Por lo demás desde la óptica de los derechos humanos el gobierno no puede aplicar restricciones a la Libertad de Expresión sólo por el hecho de estar en desacuerdo con la línea editorial del canal y ni tampoco hostigar a aquellos medios como en el caso del otro canal opositor Globovisión. No se trata de estar en acuerdo o en desacuerdo con las ideas que transmiten estos canales sino se trata de porteger un derecho fundamnetal tan caro a los defensores de los derechos fundamentales. Si hubo delitos deberán ser juzgadas las personas no los medios. En una sociedad democrática así como es importante la separación de poderes, la elecciones periódicas y multipartidistas, también es fundamental la protección de los derechos fundamentales, tanto los civiles y políticos como los económicos, sociales y culturales. Entre ellos no hay jerarquías pero sí puede hablarse una especial relevancia de ciertos derechos y libertades, tales como la Libertad de Expresión e Información que permiten a los ciudadanos involucrarse en las decisiones públicas. Saber qué hace su gobierno y también los actores privados, qué opina la oposición y la sociedad civil en general. Cómo se manejan los presupuestos, si se está protegiendo el medioambiente etc. Tan importante es este derecho que su ejercicio no puede restringirse mediante la censura previa sino que las responsabilidades deben establecerse y asumirse en forma posterior -por ello la eliminación de la figura del desacato en las legislaciones del continente- ante los tribunales de justicia.

En nuestro continente aun tenemos mucho que avanzar en la protección de este derecho fundamental. El año pasado cerca de una veintena de periodistas fueron asesinados. Además en muchos países se practica la censura y la autocensura, falta pluralismo en los medios de comunicación(como en Chile ) o se realizan maniobras para restringir la libertad de expresión. Ojalá que este episodio nos ayude a valorar más este derecho a cuya protección y promoción los Estados deben contribuir. No sólo no persiguiendo a los medios opositores o terminando con la impunidad en los asesinatos de periodistas, sino también promoviendo la existencia pluralista de medios. Así estaremos propiciando la formación de una ciudadanía crítica más integrada e informada, condición esencial para la construcción de una sociedad verdaderamente democrática.

1 comentario:

jzeballo dijo...

Marcelo Compañero!

Que buen artículo. Confieso no haber seguido muy de cerca el tema del cierre de la televisora, pero a diferencia de mis compañeros de partido entusiastas con el proceso de Chavez yo tomo mi distancia. Y tu artículo me parece muy esclarecedor sobre este punto.

Se agradece. Queda claro que Chávez ha cometido a lo menos una torpeza inexcusable y se pone sólo (y al proceso que lidera) en una senda de exlcusión y odiosidades que desvirtuan cualquier buen intento de aprovechar os excedentes de los petrodolares.

Temo imaginar el costo de oportunidad que Venezuela está pagando por insistir de modo acritico (y con un tufillo medio autoritario) en un proceso populista regado de ideario de izquierdas que encandila a militnates cándidos o muy nostálgicos.

T agradezco de nuevo tu comentario esclarecedor.

Jorge
(Comunal La Reina PS)